El: Entra, camina lento, observa todo. No dice nada, se
aleja mudo. Vuelve y pasa, deja caer
algo, se sonroja al levantarlo, mira de reojo… se va.
Regresa intranquilo, habla sólo, cuenta en sus dedos,
tararea una canción. Se mira en el
reflejo de la ventana, luciendo una pose casual, mira indiferente la escena.
Ella: Dialoga con el Otro, exagera su tono y expresiones de
risa y asombro; disfruta verlo intranquilo y lo mira sin mirarlo, se rie en sus
adentros y celebra como un atleta en el podio. El otro sin entender,
sintiéndose halagado le sigue la risa, se acaba la charla y el truco.. también.
El: respira aliviado, se complace ver al Otro abandonar su
terreno, espera en una especie de ritual en el que los minutos cuentan a la
hora de parecer indiferente y tranquilo, en una mueca de “no me importa”, se acerca para conversar, Ella luce falsamente sorprendida, aunque sus
labios no sonríen, sus ojos estallan en carcajadas.
Ella y El: Dan vueltas en una conversación que generosamente
ella alarga para disfrutar su incomodidad, El indeciso en hacer una pregunta
reclamante.. prefiere extenderse en un dialogo vacío, soso y lento.
Yo: Miro el reloj, observo el cuadro, escucho partes , analizo gestos y me
invento esta historia, mientras cuento los turnos para que llegue el 233. ;)
Nice! :D
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